viernes, 22 de abril de 2011

Tonterías


Un alma perdida es un alma a la deriva, como un velero zozobrando en mitad del mar, mecido por las olas y sin rumbo. Un alma rota es un alma hecha pedacitos por la lluvia, como cristales quebrados en mitad de una tormenta, como una botella que estalla al caerse al suelo.

Un alma cansada es un alma asediada por las dudas, machacada por las incertidumbres, perdida. Así que todo es una rueda. Un alma cansada está perdida e invariablemente, acaba rompiéndose en pedazos.
Yo me puedo perder en el instante en el que me miras, sin cansarme, sin romperme. Creo que es en el único lugar que puedo perderme sin que me sucedan esas cosas. En tus ojos, en tu mirada traslúcida, en la inmensidad de tus pestañeos.

Un alma torturada es otro tipo de alma. La vida le ha dado puñaladas, patadas,  puñetazos... Algunas veces me sentí así, y luego me di cuenta de que no era cierto. Que viví las más de las veces entre algodones, y que cuando la vida ha empezado a darme ostias, a duras penas he sabido mantenerme en pie. Me duelen tonterías, comparado con África. Me duelen tonterías comparado con niños hambrientos, esclavizados, en Asia. Me duelen tonterías comparado con mujeres que deben vender su cuerpo para sobrevivir, para mantener a sus familias, para conservar la vida. ¿Te interesan esas tonterías que me duelen? ¿De veras quieres saberlas?

Hoy mi corazón se queja por una tontería nueva. Quisiera no sentirme herida cuando abanicas pensamientos y los llevas lejos. Cuando al observarte no puedo entrever en qué piensas y te imagino lejos de mí. A veces quisiera gritarte que vuelvas a mi lado, que verte pensativo me hace sentirme excluida y duele tanto que únicamente quiero abrazarte y besarte y sentir tu piel junto a la mía.

La tristeza se apodera durante un minuto de mí. La combato con conversaciones vacuas, con risas tontas, pero a veces, una lágrima inconsciente se me escapa. Y le doy la bienvenida como buena anfitriona. Me dejo llevar. La tristeza no siempre es mala. A veces, hace que me siente frente a una hoja en blanco y le escriba versos al viento.