Hazme un hueco para el cepillo de dientes
Desata los nudos de mis cordones
y reserva un estante para mis libros.
Cuida de este amor prohibido
Hagamos que alcance su libertad
Que deje de ansiarla para obtenerla
Que deje de anhelarla y de luchar.
Necesito tus ojos todas las noches
Clavados en mi memoria, en mis recuerdos
Necesito estirar mi brazo cada mañana
Y descubrir que estás ahí, en tu lado de la cama.
Guarda un rinconcito para los miles de zapatos
¿y dónde coloco las cremas, los perfumes, los pintalabios?
Con los que cubrirte de besos las mejillas
Con los que pintarte te quieros en el espejo.
Y un sitio especial en la mesita de noche
Para ese cuaderno donde te escribo estos versos
Donde anoto las ideas y los sueños robados
Cuando por tu ausencia negocio con Morfeo.