viernes, 27 de agosto de 2010

Rap de la alegría

Hoy, releyendo viejos relatos, me choqué de frente con uno de los primeros raps que me dió, en el verano de 2005, por escribir. La tontería en sí, me duró poco, el tiempo suficiente para darme cuenta que puedo rimar bastante bien, pero mi voz de cazalla no daría el pego. Y ningún rapero tiene el ego tan pequeño como para tomar prestadas las letras de otro. Reconozco que se me da mejor la prosa, me siento más cómoda y además, no duele tanto. La rima, la poesía, duele. Siempre que me ha dado por ahí, los versos me han salido más tristes, más cargados, más nostálgicos. Tanto "Verbo auxiliar ser" como "Teléfono roto" son pruebas de ello. Incluso en "Rutina que estás en mi cuerpo" se adivina. Rimar mata.

No he estado sola el tiempo suficiente
como para dedicarte el rap de la alegría
¡mírame! yo no soy una cría
paso de estos juegos
de milongas sin salida
quise tenerte, quiero tenerte
pero huyes por la vía
rápida del dolor ajeno,
nunca creí que me vieras
como si fuera veneno.
Paso de todo, olvidarte será duro
pero tengo bastante autoestima
que me sacará del apuro.
O ¿acaso crees que no podré?
y que sufriré
estoy harta de raperos infantiles
que se creen algo
otros como tú pasaron ya a un letargo
largo que parece invierno
los escondí en mi memoria
ya no les dedico versos
creí que tú podrías sacarme de este infierno
llamado Castrocalbón
y acabaste actuando peor
que aquel otro cabrón
que se creía un león
y no pasaba de lobo.
Sé de sobra que no eres ningún bobo
pero piensa en lo que siento
no ha sido un juego
¿he sido sólo una puta nueva experiencia?
examina tu conciencia
aún no entiendo de qué huyes
no te pido nada, solo paciencia
acabar lo que empezaste aquel día
es por eso, este rap de la alegría.
Un beso, un abrazo, una caricia
siempre tan light, sin malicia
como antes
aquellas miradas incesantes
¿dije que pasaba? rectifico
o corroboro lo que digo
ya no sé, me haces dudar
¡entiéndeme! fuiste tú quien inició esto
con un solo dedo
no hizo falta más
y aquí estoy escribiendo versos
recordando tus abrazos
y comiéndome los sesos
por hacer bien, por representar
este rap de la alegría.

Ironía, agosto de 2005



Y entonces, al leerla, me ha venido a la cabeza una tontería que solía repetir yo por aquella época, cuando la persona que lo sabe todo de mí andaba preocupada por que parecía que iba a abandonar el rock por el rap. Yo le explicaba que son compatibles, y sigo creyéndolo, pero ella temía por mí y por mi salud mental.

- Ave maría purísima.
- Sin pecado concebida.
- Padre, confieso que he pecado.
- Cuéntame, hija, ¿qué te atormenta?.
- Padre... he vuelto a rapear.

No hay comentarios: